Se lesionó cuando estaba ayudando a su equipo a emparejar la serie contra Partizán de Belgrado. Sufrió como los compañeros que lo vieron desde afuera.
Gabriel Deck añadió su primera Euroliga a la gama de títulos que obtuvo con Quimsa, la Selección Argentina y el propio Real Madrid antes de probar suerte en la NBA.
El primero en ganarla fue Hugo Sconochini quien lo hizo en dos ocasiones con la Kinder Bologna: 1998 y 2001, en la segunda ocasión la logró con otro compatriota que estaba próximo a emigrar a la NBA: si, un tal Emanuel Ginóbili; quien además fue elegido MVP de la final. Al año siguiente quien pudo ganar el certamen fue Juan Ignacio Sánchez, quien la obtuvo con Panathinaikos de Grecia.
Debió pasar más de una década para que otro argentino pueda consagrarse: en 2015 con un Andrés Nocioni en el ocaso de su carrera pero manteniendo un nivel superlativo y tras un gran paso por la NBA, volvió a Real Madrid para cerrar su periplo como jugador; también fue elegido como MVP de la final. La pudo coronar con la obtención de la Euroliga con otro argentino como compañero: Facundo Campazzo.
En el caso del cordobés, pudo volver a ganarla y llevarse todos los reconocimientos individuales, confirmando su dominio en Europa, lo hizo en 2018 y de esa manera se convirtió en uno de los dos argentinos que la pudo ganar en dos ocasiones. Ahora se sumó Tortu, también con el Madrid.
Hubo varios que se quedaron en las puertas del título y debieron conformarse con el subcampeonato, como: Fabricio Oberto, Luis Scola, Marcelo Nicola, Carlos Delfino, Patricio Prato, Pablo Prigioni, Roberto Gabini, Leandro Bolmaro, Juan Domingo de la Cruz y Germán Scarone.
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