Golden State también sabe ganar sin Steph Curry. Los Warriors batieron a los Timberwolves con un triunfo a domicilio en Minnesota (99-88). Lo hicieron a pesar de no contar con su líder, quien tuvo que abandonar la cancha por molestias en el muslo izquierdo. Su ausencia forzó a dar un paso al frente a Buddy Hield, Jimmy Butler y Draymond Green, que tuvo una gran noche en la que fue hasta armador.
Hield volvió a ser clave para los Warriors en estos playoffs. El bahameño anotó el domingo 33 puntos a Houston. Este martes registró 24 puntos, 22 en la segunda mitad.
A falta del mejor triplista de la historia de la NBA, Buddy sacó pecho con cinco disparos de larga distancia. Le siguió Draymond Green con cuatro triples (18 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias). Butler tuvo un doble doble con 20 puntos y 11 rebotes, 7 ofensivos.
Los Timberwolves tuvieron problemas desde el inicio. Con solo 31 puntos anotados, registraron su primera mitad más pobre de toda la temporada.
Anthony Edwards tuvo 23 puntos y 14 rebotes después de un comienzo particularmente difícil, terminando con un nueve de 22 en tiros de campo. Reid anotó 19 puntos y Julius Randle agregó 16 puntos
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