LeBron James cumplirá 40 años en diciembre, pero ese hecho no facilitó a los Sacramento Kings la tarea de evitar una secuencia que cambiaría el juego – y otra hazaña histórica – del máximo anotador de todos los tiempos de la NBA el 26 de octubre.
Cuando quedaban poco más de 11 minutos para el final del cuarto segmento, James atrapó un pase del alero de Los Ángeles Rui Hachimura, y luego encestó un triple desde un paso dentro del logo de media cancha de los Lakers. En la siguiente jugada, James anotó un tiro en salto disputado sobre el pívot de los Kings, Alex Len. Una jugada después, James, después de luchar por posicionarse en la pintura, logró un canasta más la falta mientras estaba entre Fox y Kevin Huerter debajo del aro.
Y James no había terminado. En las siguientes cuatro posesiones de los Lakers, anotó dos triples más, asistió una clavada de Jaxson Hayes y coronó su carrera de un solo hombre al cortar la línea de base para una bandeja invertida. Siete canastas consecutivas de los Lakers convirtieron un déficit de cuatro puntos en una ventaja de 14 puntos en un lapso de tres minutos, lo que condujo a una victoria de 131-127 y el primer comienzo de 3-0 de Los Ángeles desde 2010.
James terminó con los mejores números del partido en puntos (32), rebotes (14) y asistencias (10); el jugador de mayor edad en la historia de la liga en liderar a ambos equipos en las tres categorías.
Para James, que había jugado solo 26 minutos antes de esa racha de 18 puntos contra los Kings, permanecer descansado lo suficiente para brillar en los momentos finales de los partidos será fundamental para las posibilidades de los Lakers en la repleta Conferencia Oeste.
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