Apenas tres días después de la tercera peor derrota de la historia de la franquicia, una caída por 140-88 ante Boston Celtics en la que permitieron 25 triples, los Golden State Warriors necesitaban una victoria ante Milwaukee Bucks por mucho más que por estar décimos en la Conferencia Oeste cuando el final de la Fase Regular se empieza a aproximar.
Con un rival de primera línea como los Bucks y en el escenario de la TV nacional en Estados Unidos, a Golden State se le presentaba una oportunidad de reacción. Y sus veteranos, con Stephen Curry a la cabeza, salieron a la caza de eso y lo consiguieron.
Golden State derrotó por 125-90 a un Milwaukee que es el escolta de Boston en el Este pero que no jugó como eso, sino que -excepto el tercer cuarto y un tramo del final- no estuvo a un nivel defensivo digno y encajó su mayor cantidad de puntos del último mes, en la segunda peor performance defensiva del equipo desde que Doc Rivers es el entrenador.
Curry firmó un partido de 29 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias con 6-10 en triples, Draymond Green aportó 12 tantos, 6 rebotes, 6 asistencias y 2 tapones en 25 minutos y desde el banco estuvieron Chris Paul con 6 puntos, 9 asistencias y 3 robos y Klay Thompson con 10 puntos y 4 asistencias, ambos en menos de 21 minutos.
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